Beneficios del entrenamiento funcional

media push-up durante la clase de entrenamiento funcional.

Seguramente has escuchado hablar del entretenimiento funcional y sus múltiples beneficios para la salud. Este tipo de entrenamiento es conocido por ser efectivo en ayudar a mejorar la condición física general. Basado en movimientos naturales del cuerpo, no solo fortalece los músculos, sino que también optimiza la movilidad, el equilibrio y la salud cardiovascular. Si buscas un entrenamiento dinámico y completo, el funcional puede ser una buena opción para ti. Aquí te contamos más.

Sentadllsas durante la clase de entrenamiento funcional.

Un entrenamiento para tu día a día

Como ya mencionamos, el entrenamiento funcional se enfoca en mejorar la capacidad física del cuerpo a través de ejercicios que imitan los movimientos naturales y cotidianos. Su objetivo es trabajar de manera integral tanto los músculos como las articulaciones, lo que permite un desarrollo equilibrado de la fuerza y la movilidad.

¿Qué quiere decir esto? Que realmente entrenas movimientos que, aunque a simple vista no parezca, te ayudarán a realizar mejores movimientos del día a día. Por ejemplo, un tipo de ejercicio funcional podría ser las sentadillas con peso: este ejercicio imita el movimiento de sentarse y levantarse de una silla, una acción que realizamos todos los días. Al hacer sentadillas, trabajamos las piernas, los glúteos y el core, ejercitando la fuerza y la estabilidad en estos músculos. Al mismo tiempo, se favorece la movilidad en las caderas y las rodillas, ayudando a prevenir lesiones en estos movimientos tan comunes en la vida diaria.

Este tipo de entrenamiento es beneficioso tanto para jóvenes como para adultos. En los adultos, por ejemplo, el entrenamiento funcional les ayuda a mantener su capacidad para realizar las actividades cotidianas, como subir escaleras o levantar objetos, facilitando su autonomía y calidad de vida. Para los más jóvenes, les permite mejorar su condición física desde una edad temprana, fortaleciendo los músculos y articulaciones que, con el tiempo, podrían ser más difíciles de movilizar si no se trabajan adecuadamente. Así, el entrenamiento funcional no solo previene lesiones, sino que también favorece un desarrollo físico más completo y duradero para todas las edades.

Alumna de entrenamiento funcional en barra.

Ejercicios cortos e intensos

Los ejercicios funcionales son cortos, pero de alta intensidad, y se enfocan en trabajar varios grupos musculares simultáneamente. Esto permite obtener beneficios tanto a nivel de fuerza como de salud en un solo movimiento.

Algunos de los ejercicios más conocidos en un entrenamiento funcional son:

Planchas frontales o laterales: Ayudan a fortalecer el core (zona abdominal y lumbar) y mejoran la fuerza de los brazos.

Sentadillas: Trabajan los cuádriceps, isquiotibiales y glúteos, beneficiando la fuerza del tren inferior.

Zancadas: Se focalizan en la musculatura del tren inferior, especialmente en los glúteos y muslos.

Dominadas: Ejercicio con el propio peso corporal que incrementa la fuerza de la parte superior del cuerpo.

Peso muerto: Potencia los músculos de la espalda baja, glúteos y muslos.

Hay más ejercicios, y podríamos mostrarte una gran lista, pero esta selección ya nos da una idea de que el enfoque de los ejercicios es trabajar movimientos funcionales que simulan actividades cotidianas, siendo ideal tanto para personas que buscan mejorar su condición física general como para quienes desean optimizar su rendimiento deportivo.

Alumna con barra de ejercicio y peso

Ventajas del entrenamiento funcional

Al trabajar el cuerpo de manera integral, hay una variedad de beneficios a nivel tanto físico como mental, entre los que se encuentran:

Se adapta a la persona y sus necesidades físicas. Cada persona se puede ir exigiendo progresivamente, según su condición física.

Mejora de la movilidad del cuerpo en general. Notarás como al pasar un tiempo considerable entrenando ejercicios funcionales, movimientos que antes te costaban un poco más realizar en tu día a día se vuelven. alcanzables y llevaderos.

Fortalecimiento muscular y beneficios cardiovasculares. Los beneficios en el rendimiento deportivo también son notables, progresando semana tras semana, se incrementa también la capacidad para realizar otras actividades deportivas.

 Alumna de entrenamiento funcional con mancuernas.

Integra ejercicios funcionales a tu rutina deportiva

En resumen, incorporar el entrenamiento funcional en tu rutina diaria puede suponer una mejora significativa en tu salud y tu rendimiento físico. Con ejercicios que se adaptan a tus necesidades, es una forma eficiente y accesible de alcanzar tus metas.

Una buena manera de comenzar a hacer ejercicios funcionales en el Polideportivo son las clases de Entrenamiento funcional con el profesor Nicolás Ariztimuño, u otras como la clase de Tonofit, de Cross Training o de GAP, que comparten bases de ejercicios funcionales.

¡Anímate a probarlas! Y si tienes cualquier pregunta sobre el entrenamiento funcional, no dudes en hablar con nuestros profesores.